lunes, 29 de octubre de 2012

Heber Riguetti (1948–2016) artista plástico maragato, autor del monumento a Francisco Espínola


Heber Riguetti con su obra "Paco Narador"
recién terminada, en el jardín de su 

casa en San José de Mayo, 2012.
(Diego Praderi)
Paco Narrador

Treinta y nueve años, cuatro meses  y cuatro días. Es el tiempo que transcurrió desde la muerte del notable escritor y cuentista oral hasta la inauguración del primer monumento que evoca su memoria en el Club San José. “Es simple, de lenguaje plano y lineal, pero repleto de símbolos, como era él.” Así definía Heber Riguetti su obra “Paco Narrador”, que desde el 30 de octubre de 2012 ocupa la ochava de Batlle y Ordóñez y 25 de Mayo, frente a la céntrica Plaza Treinta y Tres.

Sobre la base del artículo publicado en el semanario Brecha (Montevideo, 26 de octubre de 2012), actualizado el 17 de noviembre de 2016.

Paco Espínola, fumando espera.
¿Cómo surgió la idea de crear una escultura de Paco Espínola?
Su obra no es nueva en mi trabajo, porque desde el punto de vista de la composición va como de medida con lo que más me gusta construir: figuras simbólicas. Hace unos años el periodista Sergio Saccomani, por entonces director de las radios del SODRE, me pidió que hiciera una estatuilla de Paco para un premio literario que se entregó aquí en San José. Hice dos bocetos, de los que eligieron el que llamé “Paco Pluma” por su forma más estilizada, y quedó guardado el otro: "Paco Narrador". Hace un tiempito vino a verme Rolando Silveira, presidente del Club San José, para contarme que deseaba colocar un monumento en la ochava de la sede social que da a la calle Batlle y Ordóñez. Le mostré el "Narrador", sentado a una mesa, tomando un café o un vino, y escribiendo, gestos tan típicos de Paco. Muchos maragatos aún lo recuerdan cuando pasaba las tardes en la antigua sede del Club San José. Yo nunca lo vi, porque no lo conocí personalmente, pero me hubiese encantado compartir una copa con él. Armé un boceto de 15 centímetros, escuchando anécdotas, mirando fotos y caricaturas, que pude transformar en una escultura geométrica, con grandes planos lisos, sostenidos por piernas que parecen un libro abierto. Hay una foto que me pareció una síntesis perfecta del personaje, en la que está fumando, sentado en una escalinata, mientras parece contar una de sus historias maravillosas. El resultado final es una imagen muy de plano, muy lineal: más figurativa de los hombros para arriba, y más abstracta hacia abajo. ¡Eso sí!, le saqué el cigarrillo de la mano derecha (se ríe).

Paco en la ochava del Club San José.
Su decisión sobre el formato de los lentes, dio lugar al debate. ¿Por qué no los hizo redondos tal cual aparece en tantas fotos?
Es verdad hubo un intercambio muy lindo de opiniones. La profesora Mirtana López, conocedora de la vida de Paco, me dijo que no era él sin los lentes redondos; pero investigando vimos que en sus últimos años ya no los usaba. Sobre la marcha fui resolviendo el diseño del rostro, algo que parecía sencillo, por lo característico del personaje, ¡pero que tuvo sus complejidades! Había que delinear elementos que lo identificaran, y me gustó jugar con las líneas de su frente limpia. La mano derecha parece más grande que lo normal, porque era la que utilizaba para expresar con mayor énfasis su gestualidad. Le quité el cigarrillo, porque no aportaba valor, pero compuse un humo imaginario con las líneas ascendentes de su tronco. La escultura es un conjunto dinámico, aunque Paco esté sentado. Y los lentes redondos quedan sugeridos en un armazón grueso, recto arriba, pero circular en la base, que permite mostrar su gesto narrativo, tan querible. Hice lo mismo en una escultura de Rodó, porque el personaje se reconoce por sus rasgos, es cierto, pero mucho más por su expresión.

José Mujica en la inauguración de 2012.
Paco Narrador” fue financiado por un acuerdo del Club San José con el Ministerio de Transporte y Obras Públicas. También hubo contribuciones anónimas de materiales y dinero, y de la marmolería Aníbal Abbate que donó el granito negro que recubre la base.

¿Leyenda negra?
Paco no era amigo de protocolos, ni homenajes, pero ese no es el motivo de su mínima presencia en la ciudad. A su alrededor, el poder político maragato tejió una leyenda negra, al principio notoria, por mandato de la dictadura, pero con el paso del tiempo, y pese a que llevamos casi tres décadas de democracia, la censura persiste: más disimulada, más ambigua, pero igual de implacable. Es el castigo oficial al blanco que adhirió al Frente Amplio”, afirma el periodista Pablo Fernández, miembro de la comisión designada por el Club San José para coordinar la instalación del monumento, integrada también por respresentantes de sus otras dos pasiones intelectuales: la docente Mirtana López y el escritor Pedro Peña. Hasta entonces, Francisco Espínola solo estaba presente en una corta calle del barrio Parque Rodó y en una escuela.

La foto de Paco Espínola en la que
Riguetti se basó para realizar su obra.
Un gran vacío
De niña, recuerdo a Paquito en mi casa, conversando con mi padre y otros amigos maragatos. Tenía en sus manos, un ramito de jazmines del país que mi mamá cortaba para ofrecerle. Sus lentes, redonditos, su frente anchísima, prominente su mandíbula. Era la década de 1950. Su voz y sus manos imantaban al pequeño auditorio. Estos amigables recibimientos cambiaron a partir de su admiración por la Revolución Cubana y su adhesión al Frente Izquierda de Liberación. Sus posteriores esporádicas visitas, respondieron a invitaciones institucionales, como conferencista.”

Carlos Martínez Moreno desarrolló una simbología muy profunda, que los maragatos nunca debemos olvidar. Si bien el cierre del Parlamento fue en la madrugada del 27, se venía preparando tan morosamente como la propia enfermedad de Paco, que prefirió no ver lo que iba a ocurrir en su país.”

Cuando aún estaba en el taller.
A Paco no se le ha criticado expresamente en San José; quizá porque es demasiado grande, pero sí se lo ha transformado en un gran nombre vacío. Los profesores y los maestros han intentado, con altibajos, revivir su obra. Algunos grupos teatrales locales, lo mismo. Pero ha faltado la decisión oficial de mantener viva su forma de relatar, su pensamiento, sus reflexiones éticas, estéticas, políticas, sociales. Bienvenida sea la obra de Riguetti si su fuerza visual contribuye a quebrantar la escasísima lectura actual, pero, paradójicamente, existe un riesgo: que un legado tan vivo quede hecho una estatua.”
Mirtana López, investigadora y profesora maragata de Literatura

"Está donde lo merece"
"Fui a visitar a Heber (Riguetti) en busca de alguna escultura para colocar en la mejor esquina de la ciudad. La idea era regalarle al club una obra de arte, medio siglo después de inaugurada su sede social propia, un edificio vanguardista para su época, del arquitecto Ildefonso Arostegui. Heber me iba mostrando todo lo que tenía hecho, hasta que vimos esa figura de Paco... ¡y dejamos de buscar! No sólo por su belleza, sino porque además evoca al más genial escritor de esta tierra, injustamente relegado a la periferia por el nomenclator oficial. Está donde se merece estar: en el mismo sitio donde tantas veces se sentaba a tomarse un vinito, los más veteranos todavía lo recuerdan. Paco fue un parroquiano entrañable de la institución, y su memoria resume en sí misma la bohemia y la intelectualidad maragata."
Rolando Silveira, presidente del Club San José

Heber y Paco recién estrenado.
Cuchara y pala
"Paco Narrador" es un monumento de 1.80 metros de altura, construido en mortero de arena y portland, reforzado por una estructura de metal. "Tiene el material y el hierro suficiente para soportar las peores travesuras", aseguraba Riguetti, quien utilizó las herramientas del albañil: cuchara, pala naceta, tenaza, cortafierros, soldadora eléctrica. Fue inaugurado el 30 de octubre de 2012, en la séptima edición de la Feria de Promoción de la Lectura y el Libro de San José.

Heber Riguetti
Heber Riguetti en la Exposición Travesías,
 Centro Cultural La Paloma, Febrero 2016.
(San José Ahora)
Nacido el 25 de febrero de 1948 en Montevideo, maragato desde los cinco años cuando llegó a San José de Mayo con su familia.
Se definía como un autodidacta de la escultura, sin ocultar su admiración y gratitud por sus maestros e inspiradores Hugo Nantes, Octavio Podestá y Nelson Romero. “Me encanta ver algo donde parece haber nada”, afirmaba en 2012, entrevistado en su casa luego de culminar "Paco Narrador".
Participó en más de 30 exposiciones individuales y colectivas, desde fines de la década de 1960, en Uruguay y el exterior.
En 1982 obtuvo el Primer Premio del 46° Salón Nacional de Artes Plásticas de Montevideo, en 1996 y 1997 realizó la “Mejor vestimenta de Murgas” del Carnaval capitalino.
Algunas de sus obras más conocidas: Garufo que desde 2003 se otorga a las figuras más destacadas del Carnaval de San José; Trabajador Rural (2007) ubicado en el bulevar Aparicio Saravia y Ruta 3, en la entrada de San José; Monumento a Pablo Bengoechea instalado en 2001 en Los Aromos, concentración del Club Atlético Peñarol; intervención vertical en el Teatro Macció que ocupa una esquina desde la planta baja hasta el Paraíso.
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Colocando un querubín de la Plaza Treinta y Tres.
(Primera Hora, 2013)





En 2013 restauró uno de los querubines de la Pirámide a la Paz de Abril, símbolo escultórico maragato ubicado en la Plaza Treinta y Tres, luego que cayera en los festejos de la Semana de la Juventud de aquel año.
–Heber Riguetti, el artista plástico más representativo de San José en las primeras décadas del siglo XXI, falleció el 17 de noviembre de 2016, a los 58 años. En la tarde anterior había sufrido un accidente cardiovascular mientras trabajaba en su taller.

“Travesías”
–Fue la última gran muestra de Heber Riguetti. que convocó a multitudes en la temporada veraniega 2016 del balneario La Paloma.
–Entre febrero y marzo el escultor maragato expuso obras inéditas de gran porte alusivas a naufragios en costas uruguayas, en el marco del proyecto San José Demuestra

Paco y Don Paco Espínola
Los Espínola Cabrera en fiesta familiar de la
década de 1920. El cuarto de izquierda
a derecha, sentado, es "Don Paco", 
el tercero desde la izquierda con una
niña en la falda, el joven "Paquito".
Si Paco fue una personalidad de la cultura uruguaya, su padre, el inmigrante canario Francisco Espínola Aldana, fue un personaje maragato. El periodista y político blanco participó en las revoluciones de 1897 y 1904, lideradas por Aparicio Saravia, y en el alzamiento de 1935, conocido como Paso del Morlán. Fue uno de los jefes del frustrado motín contra la dictadura de Gabriel Terra, al que llevó a su primogénito que luego describió sus temores, y su captura por las tropas gubernamentales, en una crónica memorable.
Don Paco había nacido en 1871, en Yaiza, poblado cercano a un sitio de leyenda: la primera parroquia de San Marcial del Rubicón de Lanzarote, donde se inició la colonización de las Islas Canarias, muy a principios del siglo XV.
Cuando Paco vino al mundo, el 4 de octubre de 1901, Espínola Aldana era un influyente caudillo maragato, casado con Justina Cabrera Corujo.
El niño aprendió con su madre a observar a sus semejantes, hasta en los mínimos detalles; y con ambos comprendió el significado de amar el “pago” y el compromiso con el Partido Nacional.
Victoria, la segunda hija del matrimonio, nació en 1904, pero el rebelde canario la conoció tiempo después, porque estaba ausente, como soldado de Aparicio Saravia.
En setiembre fue herido en Masoller, y al año siguiente nació su tercera hija, Enriqueta.
En 1910, cuando participaba en la revuelta armada contra la reelección de José Batlle y Ordoñez, moría su suegro, Fernando Cabrera, quien tantas veces lo había cobijado en su estancia de Rincón del Pino, luego de sus aventuras contra el gobierno colorado de turno. Cabrera había cuidado la tropilla de caballos azulejos de Manuel Oribe.
Paco fue a estudiar Medicina en 1919, y al poco tiempo participó en las elecciones internas del Partido Blanco Independiente, en la “Lista de los poetas” del escritor Javier de Viana.
En Montevideo describía su casa familiar maragata en relatos orales que convocaban a ruedas interminables de amigos y compañeros. “Era enorme y señorial, de grandes patios cubiertos con pisos de piedra y en cuyo fondo se alineaban las caballerizas.”
De Don Paco decía: “De él obtuve lo fundamental: formación cristiana, tradición criolla, devoción filial por los caudillos –mi padre es uno de ellos- paternal conmiseración por los infelices desheredados a quienes se daba amparo en la casa del abuelo y en su propia casa.”
En 1935, los Espínola, padre e hijo, participaron en el levantamiento del Paso del Morlán, un paraje del departamento de Colonia, donde una treintena de rebeldes blancos independientes, batllistas, socialistas, comunistas liderados por el general Basilio Muñoz, y el propio caudillo maragato, se enfrentaron a las fuerzas de la dictadura de Gabriel Terra.
Paco dejó su memoria de los hechos en una carta al filósofo Carlos Vaz Ferreira, que retrata mejor que nadie aquel episodio, mientras reconoce su miedo al peligro, a la violencia, y a la propia batalla en la que participó de saco, camisa y corbata, con un rifle que no funcionaba. El saldo fue de ocho muertos, decenas de prisioneros, incluido el escritor de 33 años.
Cuando estimó esa valerosa acción, Don Paco fue elocuente: "¡Estoy orgulloso de usted, m’hijo!" Al viejo jefe nacionalista nunca le importó la notoriedad literaria del joven, ni que fuera un celebrado cronista de la popular revista Mundo Uruguayo, del diario El País, ni sus celebradas críticas literarias en Marcha.
Nunca abandonó una simbología heroica, a la que Paco solía aludir. “Mi padre… yo tendría ocho o nueve años, me decía: ¡usted tiene que tener un cuidado bárbaro!, más que nadie, porque usted es noble… Pero ¿sabés para qué me decía que éramos nobles? No para compadrear, sino porque así yo tenía la obligación de cumplir con los de atrás, siendo como ellos, imponiéndome deberes con todo el mundo, sirviendo a todos, y ¿qué es lo que noto yo ahora? Papá me leía también y estaba templándome. Me hacía querer y admirar a los grandes personajes.”
Francisco Espínola Aldana murió el 11 de abril de 1948, cuando Paco era una de las cumbres narrativas del país, ensayista, dramaturgo (que firmaba “Francisco Espínola hijo” por pura devoción paterna, según Carlos Maggi), memorable profesor de Literatura en el Instituto Normal, Enseñanza Secundaria y Facultad de Humanidades.
Sus Mateadas con los clásicos” (así le llamaba Juan Carlos Onetti a sus clases abiertas) son leyendas de la narrativa oral, inolvidables para una multitud de alumnos curriculares y asistentes “extracurriculares”.
Su obra se inició con “Raza ciega” (1926), a la que siguieron: “Saltoncito” (1930), relato infantil muy difundido en las escuelas, “Sombras sobre la tierra” (1935), “La fuga en el espejo”, pieza teatral estrenada en 1937, “Las Ratas” (1945), “El rapto y otros cuentos” (1950), “Milón o el ser del circo” (1954), un ensayo sobre temas estéticos.
“Sus páginas están dotadas de ese poder sugestivo que sólo poseen los narradores de garra”, afirmaba Alberto Zum Felde. En 1961 recibió el Premio Nacional de Literatura, y en 1968 publicó tres fragmentos de “Don Juan, el Zorro”. Una expresión representativa de la literatura latinoamericana contemporánea, que luego fue obra póstuma, editada en 1984, como una reconstrucción de fragmentos éditos e inéditos realizada por los críticos Arturo Sergio Visca y Wilfredo Penco.
En 1962 adhirió al Frente Izquierda de Liberación, junto con su amigo y cuñado Luis Pedro Bonavita (“otro maragato terriblemente olvidado”, afirma Mirtana López).
En 1971 se afilió al Partido Comunista y al Frente Amplio, en un gran acto público, ¡justo él! que había arriesgado la vida por la divisa blanca de su padre. Lo que nunca cambió fue un heredado amor por la democracia y la libertad.
Su muerte fue un emblema de ese legado. Falleció en la noche del 26 de junio de 1973. Un día antes del golpe de Estado más cruel y doloroso en la historia del país.

Jardín Zoológico Municipal Dolores Pereira de Rossell

Más que un siglo de paseos

(Alejandro Sequeira, 2008)
El espacio zoológico de Villa Dolores fue fundado en 1894 por una iniciativa de los esposos Alejo Rossell y Rius y Dolores Pereira Buxareo. El 28 de octubre de 1912 pasó a propiedad municipal por una donación del matrimonio, pero el legado recién se hizo efectivo el 14 de marzo de 1919, luego del fallecimiento de los filántropos. El actual parque ocupa el mismo espacio geográfico del principio, organizado en áreas geográficas y temáticas pensadas con un moderno concepto didáctico: Región Africana, Región Americana, Región Australiana, Grandes Felinos, Camélidos Sudamericanos, Paquidermos, Primates, Vivario.

Naturaleza
–Un martes de mañana los alumnos de quinto año pasaban frente al espacio que comparten los yacarés y las tortugas, cuando a uno de ellos, muy despierto, se dio cuenta de algo que le llamó la atención.
–¡Mire maestra!, los yacarés viven con las tortugas y no se las matan.
–Es verdad, ¡así es la naturaleza! Los yacarés, como todos los animales, solo atacan si tienen hambre. Y estos están muy bien alimentados –explicó la docente.
–Entonces, ¿el único que mata por matar es el hombre? –fue la pregunta espontánea, que la dejó reflexionando.

Un carruaje de la familia Pereira Rossell,
frente a la histórica palmera del zoológico.
Don Alejo Rossell concibió la idea de formar un parque temático dedicado a la fauna autóctona en su finca de recreo ubicado sobre la actual avenida Rivera. Tan grande fue el éxito que también adquirió fauna exótica, mientras se plantaban árboles y palmeras en el predio de siete hectáreas y se levantaban refugios que simbolizaban al país de origen de los animales protegidos. Se construyeron también varios lagos de nombres memorables –Azul, Blanco, Japonés–, un estanque de lobos marinos, alimentado por agua de mar que se bombeaba desde el Río de la Plata y un cementerio zoológico, el primero de su tipo en el continente.
Su primer director estatal fue el médico Carlos Alberto Torres de la Llosa, un prestigioso catedrático de Historia Natural que lo transformó en un centro de investigación, preservación y de divulgación de las ciencias biológicas. En la década de 1920 eran famosas las visitas nocturnas al parque que estaba iluminado con la más moderna tecnología.
Antigua entrada a Villa Dolores.
Una evolución acompañada por un cambio de nombre: del original Villa Dolores al actual de Dolores Pereira de Rossell. También se modificaron construcciones, caminos y pabellones; llegaron más animales, fue creada la casa de los grandes monos y dos reptilarios, uno cerrado y el otro al aire libre.
Guacamayo.
Desde hace más de un siglo el zoológico de Villa Dolores es uno de los paseos preferidos de los uruguayos, y siempre lo será, sin importar creencias, origen, cultura o edad. También fue el pionero americano, hace 52 años, en la creación de un cuerpo docente especializado informa sobre fauna y ambiente, en coordinación con los planes escolares vigentes. Las clases se cumplen en dos turnos, a las 9 y 14 horas, con un objetivo fundamental: educar para el conocimiento, conservación y protección de las especies. El parque cuenta con una sala audiovisual, materiales didácticos y juegos interactivos; también se realizan actividades nocturnas para adultos y visitas coordinadas para niños con capacidades diferentes. “Los jóvenes de esta época se caracterizan por ser inquietos, ansiosos de conocimiento y de respuesta a sus preguntas, y en ese sentido, les proponemos el mayor contacto posible con la naturaleza. Para nosotros se trata de una muy buena forma de crear conductas positivas frente a los animales y de estimular la toma de conciencia sobre los problemas ambientales”, afirma el médico veterinario Fernando Cirillo, director del Zoológico Municipal Dolores Pereira de Rossell.

Sobre la base del fascículo N° 13 de la Serie Paseos que Enseñan, editada por Trocadero Gabinete Diseño para el diario El País (Montevideo, Setiembre 2008).
Agradecimientos: Dr. Fernando Cirillo, director del Zoológico de Villa Dolores, Beatriz Martínez, Cristina Santini, Ana María Chiribao, Elena Zagarzazú, maestras especializadas del Sector Docente.


Jardín Zoológico Dolores Pereira de Rossell
Barrio: Villa Dolores
Ubicación: Rivera 3245
Ciudad: Montevideo
Teléfonos: 26229108 / 26285141
Web: www.montevideo.gub.uy/zoo/
Email: zoo.villadolores@imm.gub.uy

Información General
Visitas: de miércoles a domingo de 9 a 18 horas. Menores de 12 años y mayores de 70 años gratis. Los miércoles la entrada es gratuita para todo público. Las clases destinadas a todas las escuelas del país deben ser agendadas con anticipación con el Sector Docente.

Preguntas que guían
Ilustración de tapa del fascículo N°13
"Zoológico de Villa Dolores", de la
serie Paseos que Enseñan
(Alejandro Sequeira, 2008).
¿Qué es fauna autóctona? ¿Qué funciones educativas y ambientales cumple un zoológico? ¿Cómo está organizado el espacio de Villa Dolores? ¿Qué informan los carteles educativos? ¿Cuándo una especie está en riesgo de extinción? ¿Qué diferencia al lobo marino uruguayo de la foca? ¿Por qué los ejemplares de nuestro zoológico no se compran ni se venden? ¿Qué hace un veterinario?

¿Cómo llegar?
Todos los ómnibus que pasan por la avenida Rivera: 60, 71, 141, 142, 144, 191, 328, 329, 468, 526, 7E7, D11.

Visión y Misión
“Atentos a los requerimientos modernos, trabajamos en el mejoramiento de la calidad de vida de los animales, con una preocupación constante por su bienestar. Nuestros objetivos son claros: educar, conservar, investigar.
El Sector Docente da una especial importancia a los cambios en las actitudes y conductas hacia los animales y el medio ambiente. Los temas que se tratan están adaptados a los distintos niveles escolares, adecuados a la edad y a los intereses de los niños.
Avestruces.
También se dictan clases por parte del Servicio Veterinario a estudiantes de los primeros años universitarios de carreras afines a las materias zoológicas, a efectos de brindar un aporte al desarrollo de los futuros profesionales.
Villa Dolores aporta investigación científica mediante intervenciones quirúrgicas, trabajos veterinarios sobre diferentes especies, y en temas reproductivos información de alto valor para el bienestar animal.
Como importante aporte a la conservación, vemos numerosas especies que se reproducen con éxito, algunas de las cuales se encuentran en serio peligro de extinción. Hoy podemos ver pichones de guacamayo, ciervos, guazubirá, jaguares, alpacas.”
Página web de la Intendencia de Montevideo

Mapa de Villa Dolores.
Sector Docente de Villa Dolores
Es una propuesta educativa pionera en América; creado en 1956 por la maestra e investigadora Gladys Piñeyrúa Juárez.
El zoológico de Villa Dolores no realiza visitas guiadas, sino que imparte clases de zoología y cuidado del ambiente, dirigidas a escuelas e instituciones educativas y culturales de todo el país. El Sector Docente ha organizado sus charlas sobre seis temas curriculares. Grandes animales: elefantes, jirafas e hipopótamos (primer año). Hibernación y vida en comunidad: leones, tigres, jaguares y otros felinos (segundo). Espacio vital, plano del zoológico, la fauna de Montevideo: palomas, gorriones, gaviotas, tortugas, pequeños reptiles (tercero). Fauna nacional: felinos, reptiles, lobos marinos (cuarto). Fauna americana (quinto). Fauna del mundo: selvas, desiertos, sabanas (sexto).

Un espacio centenario
Canguros de la Región Australia.
“El Parque Zoológico Municipal Dolores Pereira de Rossell está organizado en regiones geográficas y áreas temáticas. Los continentes que se destacan en el recorrido son África y América, a los que se ha sumado Australia. Las áreas temáticas más importantes, en cuánto a superficie y número de ejemplares, son las de Grandes Felinos, Camélidos Sudamericanos, Paquidermos, Primates y Vivario. “Esta división nos permite observar semejanzas y diferencias entre grupos o familias de especies, según los más modernos criterios de clasificación. Está diseñada para que el público disfrute de un paseo pero que también comprenda que este es un sitio planificado de forma coherente y con ideas de avanzada, y para que los escolares que llegan a las clases vean facilitado el acceso a la información científica y didáctica.”
Elena Zagarzazú, maestra del Sector Docente de Villa Dolores

Ciervo Axis.

ICOM
“El zoológico es un museo viviente, según definición del ICOM (Consejo Internacional de Museos), de la misma importancia educativa que un Área Protegida o un Parque Natural.”
Beatriz Martínez, maestra del Sector Docente de Villa Dolores, ex directora del Museo Zoológico Dámaso Antonio Larrañaga.

La mona fugada
Los monos baubinos o papiones viven
desde hace más de tres décadas en
el zoológico de Villa Dolores.


Era la más juguetona y chillona del zoológico, allá por 1988. Tan traviesa, que el 18 de diciembre de ese año se escapó de la jaula para correr libre por cada rincón de aquel lugar que era su territorio. Los veterinarios, los guardias, los funcionarios, trataban de convencerla para que volviera a su pequeña celda; pero no había caso. No la convencían las bananas, ni galletitas, ni golosinas. Ella prefería la libertad, que era mucho más dulce. Hasta que llegaron dos policías. La mona miró fijo a uno, y le pidió su gorra azul. El hombre accedió a prestársela; a cambio ella le dio la mano y aceptó ser llevada hasta su jaula por quien consideraba un amigo generoso. Un amigo que jamás recuperó su gorra, porque la mona quiso conservarla para toda la vida.

Alejo Rossel y Rius manejando
su Delin 1900, matrícula N°1.
Villa Dolores
No hay una fecha exacta para la fundación del barrio, aunque celebró sus cien años en 1994 con una muestra de vehículos antiguos del Museo del Automóvil Club del Uruguay, y de tranvías de la Asociación de Amigos del Riel. La pieza que sorprendió a los visitantes fue un Delin belga, de 1900, que conservaba la matrícula N° 1, por haber sido el primero que llegó al país. Su propietario fue el filántropo Alejo Rossell y Rius, donante del predio donde está ubicado el zoológico municipal, en el barrio que aún evoca la memoria de su esposa: Dolores Pereira Buxareo. El Delfín es una pieza extraordinaria, que aún funciona a la perfección, que en aquella fiesta dio alguna vuelta a su velocidad que no superaba los 30 kilómetros por hora.

Hienas nacidas en cautiverio.
Fauna
Es el conjunto de animales que viven en una zona o región. La fauna se divide en dos grandes grupos: los invertebrados (la forma más antigua y primitiva de vida) y los vertebrados, que se subdividen en peces, anfibios, reptiles, aves, mamíferos.

“La fauna autóctona uruguaya está muy bien representada en nuestro zoológico; muchas de estas especies aún no han desaparecido por el esfuerzo de quienes realizan un trabajo de conservación.”
Fernando Cirillo, cirujano y especialista en animales silvestres, director de Villa Dolores.

Cada año más de 800 mil personas visitan el zoológico de Villa Dolores; más de 100 mil escolares asisten a las clases que brinda la institución.

MINIBIOS
Dolores Pereira Buxareo (1852–1915)
Nacida en Montevideo, el 22 de noviembre de 1852, fue la donante, junto con su esposo, Alejo Rossell y Rius, del predio que ocupa el zoológico municipal que lleva su nombre. Doña Dolores, como se la conocía a principios del siglo pasado, fue nieta del ex presidente Gabriel Antonio Pereira y de una influyente personalidad de los primeros tiempos del país: Félix Buxareo. De ambas ramas familiares heredó una considerable fortuna, que compartió con su país y su ciudad a través de donaciones que le han dado continuidad y reconocimiento a su memoria. Otro sitio vinculado con su actitud filantrópica es el Hospital de Niños Pereira Rossell. En las crónicas periodísticas de su época era descripta como “una dama poseedora de altas virtudes benéficas, considerada y tolerante”.

Dolores Pereira Buxareo y
Alejo Rossell y Rius en la
inauguración de su zoológico.

Alejo Rossell y Rius (1848–1919)
Nacido en Montevideo, hijo de Alejo de Ibaceta y Esperanza Rius, fue un niño huérfano que encontró a su padre de crianza en Juan Rossell, segundo esposo de su madre y de quien adoptó su apellido en reconocimiento filial. Fue un rico empresario financiero y filántropo, cuyo nombre está unido al de su esposa Dolores, como uno de los mayores benefactores de Montevideo.
Después haber contribuido a la fundación del Hospital de Niños, edificado en terrenos de su propiedad, también donó al municipio el jardín zoológico que había instalado en su finca de verano conocida como Villa Dolores, varios conjuntos de casas para obreros, colecciones de pinturas, muebles y objetos artísticos que fueron base del Museo Municipal de Bellas Artes.

Carlos Torres de la Llosa (1866–1959)
Médico cirujano y naturalista, nacido en Durazno, fue el primer director municipal del zoológico de Villa Dolores, entre 1920 y 1934. Como educador y naturalista se interesó por la observación y protección de las aves, en salidas de campo con docentes y estudiantes que recorrieron todo el país. En 1925 registró por primera vez tres especies autóctonas: el "Burrito plomizo" (Porzana spiloptera) en la barra del arroyo Pando; el “Burrito de patas verdes" (Laterallus melanophaius) en los bañados de Carrasco; y un ejemplar macho de "Águila negra" (Buteogallus urubitinga) en el departamento de Rocha. Varias generaciones de estudiantes estudiaron en sus libros: Botánica, Zoología, Zoografía, Anatomía y fisiología humama. Fue director del Museo de Historia Natural, hasta su muerte, en 1959. Al año siguiente, un 14 de setiembre, el Consejo Nacional de Educación Secundaria resolvió darle su nombre a este centro educativo, considerado en su tiempo el mejor de América Latina.

600
Es la cantidad de ejemplares que posee el zoológico de Villa Dolores en sus siete hectáreas delimitadas por la avenida Rivera y las calles Dolores Pereira de Rossell, Alejo Rossell y Rius, La Gaceta y Horacio. Dentro de ese total están representadas más de 200 las especies, provenientes de los cinco continentes, conservadas y protegidas por la institución.

Además de la señalización que facilita la comprensión de temas y regiones, el zoológico publica folletería informativa y una revista educativa: Bichos.

Suricatas.

Pelos y señales
Los modernos carteles del antiguo parque nos cuentan historias de seres encantadores que están allí para ser descubiertos, respetados y protegidos. La propuesta a los visitantes, de todas la edades, es muy sencilla. “Para que tu paseo sea una aventura maravillosa, te proponemos que descubras en la cartelería todo lo que siempre quisiste saber sobre los animales que viven en el zoológico”. Y también un desafío a la sensibilidad y la inteligencia. “Si eres un buen detective descubrirás que el color que rodea cada cartel te ubicará en el área o región donde te encuentras”. Por ejemplo, el verde del letrero que aparece a continuación nos indica que estamos en América.

Un consejo de maestras y veterinarios: no dar alimentos a los animales para no perjudicar los beneficios de una dieta balanceada.


Área de Grandes Felinos
Es la familia más amplia del orden carnívoros, devoradores de carne, por naturaleza. Sus dimensiones varían extraordinariamente y su longitud oscila entre unos pocos decímetros del gato montés, a los dos metros (excluida la cola) del león. Los felinos son veloces y ágiles en el salto; trepan y nadan. Corren muy rápido pero la mayoría no sostiene largo tiempo una marcha rauda. Aunque pueden moverse activamente de día, tienen hábitos preferentemente nocturnos. Estos poderosos cazadores se hallan en los medios más dispares: desde el llano al monte, del desierto a la selva. Desempeñan una gran labor en el mantenimiento del justo equilibrio entre los animales herbívoros y el mundo vegetal. En Villa Dolores podremos ver algunos ejemplares que alguna vez habitaron nuestro territorio: el jaguar y el puma. 

Vivario
Iguanas de Villa Dolores.
(Alejandro Sequeira, 2008)
Es el edificio que alberga a reptiles e invertebrados, concebido con el objetivo de recrear el ambiente de cada especie, y con la idea de alojarlos conjuntamente tal como sucede en la vida silvestre. Entre otros ejemplares allí podremos encontrar:
Los Saurios son reptiles con la piel recubierta de escamas de origen epidérmico, de cuatro patas, apertura externa de oído y párpados móviles; que pueden desprenderse fácilmente de la cola y luego regenerarla. Algunos ejemplos: Iguana verde, originaria de América Central y América del Sur, que posee una cola larga y delgada bordeada por una hilera de afiladas escamas; Gecko, lagarto de climas templados y tropicales que posee una gran facilidad para trepar por paredes y techos. Entre los Artrópodos están los Escorpiones: el más común en nuestro país es el Tityus uruguayensis que habita en libertad en lugares de serranías, de pradera y zonas cercanas a Montevideo.
Crucera.
Los Opiliones se parecen a sus primas las arañas, pero no hacen tela y casi no cazan para conseguir alimento. Se defienden emitiendo una sustancia olorosa (a veces fuerte e intensa) que es segregada por glándulas especializadas.
La serpiente Pitón (Python molurus) es originaria de Asia y la Pitón de Seba (Piton sebae) proviene del continente africano; anbas se alimentan de mamíferos. La Boa de las Vizcacheras (Boa constrictor occidentalis), originaria de América del Sur, se alimenta de aves, lagartos y mamíferos.

En América del Sur hay sólo cuatro especies de camélidos: la llama, la vicuña, la alpaca y el guanaco.

Llama.
Área de Camélidos sudamericanos
Los camélidos son artiodáctilos rumiantes de pelaje largo y lanoso así como cuello y patas muy largas, que al caminar apoyan gran parte de los dedos y no sólo la punta: por eso se les denomina digitígrados. Así se diferencian de otros camélidos que solo apoyan la punta de los dedos, conocidos como ungulígrados. Detrás de las pezuñas, que son pequeñas y alargadas, tienen una especie de almohadillas o suela callosa que apoya de plano en el suelo. Las diferencias físicas se deben a una distinta necesidad de adaptación a la vida en zonas de altitud. En Villa Dolores podremos ver ejemplares de alpacas, guanacos y llamas.

Pecaríes de collar, guacamayos, coatíes, manos peladas, liebres de la Patagonia, agutíes dorados, aves rapaces, monos capuchinos, entre tantos, forman parte de la Región Americana.
Cachorro de jaguar americano.
Región Americana
En nuestro continente encontramos paisajes tan diferentes como las pampas argentinas que al norte se tornan en sabanas arboladas, verdaderas estepas arbustivas, algunos de los desiertos más secos del mundo (norte de Chile), altiplanicies de cotas elevadas. Se trata de un apretado mosaico de medios naturales que conforman un auténtico paraíso para la diversificación de las especies animales que viven en diferentes nicho ecológicos. En esta región se observan ejemplares nativos amenazados de extinción como el venado de campo y otros que sus poblaciones en vida silvestre han disminuido y que se han reproducido aquí, como es el caso del guazubirá. También podremos disfrutar de recintos donde conviven distintas especies de aves que aportan su hermoso colorido y mamíferos, recreando así uno de los paisajes naturales que encontramos en América del Sur. Allí está, aún cubierto de esplendor, el ejemplar más anciano de Villa Dolores: un cóndor andino que ya pasó los 75 años.

Ciclón es una cría de dromedario, nacida a fines de agosto del 2005, fruto del trabajo de conservación que se realiza en Villa Dolores.

Región africana
Es el continente de hombres más antiguo y una región rica en contrastes. Desde los áridos y calurosos desiertos del Sahara o del Kalahari hasta las nieves perpetuas del Kilimanjaro o del monte Kenya, pasando por la lluviosa y cálida selva virgen de la cuenca del Congo. Es una importante red de reservas naturales que asegura la supervivencia de numerosas especies animales y la más tradicional fuente de información para los zoológicos de todo el mundo. El equipo de investigadores de Villa Dolores contribuye a la enseñanza de esa gran variedad de paisajes, con un sitio protegido para dromedarios, hienas, jirafas, cebras, rinocerontes blancos, ciervos dama, gallinas de Guinea, suricatas y avestruces”, afirma la maestra Cristina Santini, del Sector Docente.

El período de gestación de un elefante dura 24 meses y su promedio de vida es similar al de un humano.

Leo
Fue el primer elefante uruguayo y el personaje más recordado del zoológico de Villa Dolores, nacido el 25 de julio de 1974. “Cuando cumplió dos años era muy simpático, travieso y juguetón. No medía sus fuerzas, por eso teníamos que tener mucho cuidado. A los cuatro años lo apartamos de la madre y tuvimos que quedarnos día y noche porque la extrañaba mucho. Dormíamos con él. No le gustaba que le reprendiéramos sin razón. Era un animal muy inteligente. Le gustaba que lo montáramos y jugaba mucho. A los seis años nos prohibieron que subiéramos a caballo de Leo, por un accidente que había ocurrido. Atendía el llamado cuando le silbábamos, porque sabía que era para comer. A los ocho años le cortamos los colmillos, el derecho medía 43 centímetros y el izquierdo 38 centímetros. Ya no dejaba que nadie entrara, solo su cuidador.
En 1984 sentimos mucho la muerte de Deelep, su papá. Hubo que juntarlo con Yothy, su mamá, por miedo a que se murieran de tristeza. Leo se sentía como un niño junto a su madre, se puso juguetón con ella y con nosotros. Le gustaba que lo mimaran, nos envolvía con su trompa, ns colgábamos de sus colmillos y disfrutaba cuando lo bañábamos.
Leo murió el 19 de enero de 1987. Una muerte insólita, paro cardíaco. No podía entenderlo. Sabiendo que estaba perfectamente bien hasta entonces. Hasta ahora no me puedo convencer, lo único que tenía en el estómago era ración. Sentí mucho su muerte, siendo como era conmigo. Era mi amigo y quizá nunca vaya a cuidar un animal tan noble”. Esta es la historia de Leo, contada por su mejor amigo, el cuidador José González, quien hasta aún lo sigue extrañando.

Así era Yothy.
Deelep y Yothy
Son los padres de Leo, una pareja de elefantes hindués arribados al país en 1969. Fue una historia increíble porque su destino original era un zoológico de Brasil, pero les fue negado el ingreso por motivos sanitarios. Cuando el barco siguió la ruta atlántica rumbo al sur, el capitán anunció su intención de arrojarlos al mar porque no podía regresar con ellos. La noticia fue conocida en Montevideo, donde se hicieron los trámites para que fueran llevados a Villa Dolores. Yothy quedó embarazada en 1972 y tuvo a Leo, el primer elefante nacido en Uruguay, el 25 de julio de 1974.
Yothy falleció el 5 de junio de 2012, a los 60 años, luego de padecer una dolorosa artrosis de cadera. En los últimos días su salud se fue complicando al punto tal de estar la mayor parte del día en la piscina para quitar la presión de su peso corporal sobre las extremidades. Cómo su enfermedad era irreversible, los veterinarios la sacrificaron para evitarle más sufrimientos.

Clorinda
Es la hipopótamo africana, de algo más de 30 años, cercana vecina de Yothy. A pesar de ser joven es viuda, su pareja era mucho más vieja y falleció. Los hipopótamos, con dientes de 50 centímetros de largo que pesan hasta cuatro kilos, se consideran los animales más peligroso de África.

La jirafa Rayo nació en octubre de 2006,
en Villa Dolores, y es el tercer ejemplar

uruguayo de su especie.
Sol y Luna
La llegada de la pareja de jirafas y el nacimienio de su hija Lucero, es una anécdota encantadora, protagonizada por escolares del barrio Flor de Maroñas. Fue una aventura de niños emprendedores que cumplieron con un sueño solidario. Que tuvo un final feliz, celebrado un inolvidable 26 de octubre de 1999, cuando Lucero cumplió un año de nacida en Villa Dolores. Ese día hubo una torta gigante, con una velita que apagaron cientos de invitados, mientras la homenajeda se movía de un lado para el otro para que no le colocaran un sombrerito festivo.
La historia había comenzado seis años antes, en 1993, cuando los alumnos de 2° año de la escuela 173 de Flor de Maroñas le enviaron una carta al entonces intendente Tabaré Vázquez. El gobernante montevideano se sorprendió por el pedido –una pareja de jirafas para el zoológico– y dispuso que se cumpliera con el anhelo. Sol y Luna vinieron desde Alemania, en 1995, por un canje por lobos marinos. No fue un arribo común. Hubo una gran caravana, encabezada por el casal y escoltada por los niños que las habían solicitado, y una fiesta popular de bienvenida. Al poco tiempo Luna quedaba embarazada.

Dos cartas
Cuando visitamos el zoológico nos dimos cuenta que faltaban la jirafas que habían visto nuestros familiares hace mucho tiempo. Por eso pensamos que sería lindo tenerlas nuevamente para poder verlas allí y decidimos averiguar como se podía hacer para conseguir un casal.”
Carta de los alumnos de 2° B de la Escuela N° 173, de Montevideo, al entonces intendente Tabaré Vázquez, 9 de diciembre de 1993.

Qué contentos nos sentimos cuando nos respondió en octubre que ya se estaba tratando de conseguir un casal de jirafas."
Carta de los alumnos de 3° B de la Escuela N° 173, a Líber Rey, director del zoológico municipal.

Jaguares, tigres, leones serpientes, aves, son pacientes rutinarios de veterinarios y funcionarios de un zoológico.

Fernando Cirillo, cirujano veterinarios, especialista en animales silvestres, director de Villa Dolores
Un zoológico existe para educar, investigar, conservar y recrear”

¿Cómo consigue sus animales el zoológico?
Nosotros partimos de un principio: nuestros animales no se compran, ni se venden. Nuestra forma de conseguir nuevos ejemplares, es el intercambio con otros zoológicos que pueden necesitar especies uruguayas y que están dispuestos a entregarnos las de su tierra. El intercambio va más allá de una forma de adquirir, significa que se hace un trabajo científico para que ese animal vaya de la mejor manera, para que tenga una buena vida y para que cumpla con la función educativa pensada por la institución que se lo lleva.
Hay un caso muy interesante que nos ocurrió en 2007 cuando canjeamos algunos lobos marinos con un zoológico de Tailandia, para traer canguros, emures (para formar una zona geográfica australiana), linces canadienses y un grupo de suricatas africanas. Para enviarlos, antes debimos hacer un trabajo de adaptación a una nueva forma de alimentación, porque el lobo no sabe comer peces muertos, solo sabe tragarlos cuando los caza. Necesitamos un mes y medio para enseñarles a recibir el alimento de otra forma. Para eso debimos ir a la Isla de Lobos, investigar, asesorados por biólogos de la Dirección Nacional de Recursos Acuáticos. Finalmente, los lobos se adaptaron a su nueva vida, por el trabajo del grupo de cuidadores de animales del zoológico, conjuntamente con el sector veterinario. Todos los animales tienen un valor, entre los uruguayos, el más apreciado es el lobo, muy abundante en las costas de Maldonado y Rocha.Por eso decimos que el canje de especies no es un negocio, sino una forma de intercambio científico. Nunca hay que olvidar que un zoológico tiene cuatro objetivos principales: educar, investigar, conservar y recrear.

¿Cuánto sufren los animales encerrados en una jaula, privados de su natural libertad, lejos de su ambiente?
Entiendo a quienes creen que el zoológico no es el mejor lugar; hasta estaría de acuerdo. Pero hay que entender dos cosas. La primera es que esos animales que intercambiamos no son sacados de sitios naturales, sino que vienen de generaciones en cautiverio, o sea que en realidad, su ambiente natural era otro zoológico. Pero hay otra explicación más importante: la preservación de especies en riesgo de extinción o extinguidas. Nos ocurre con los jaguares. Podemos decir que somos el principal centro de preservación de esta especie, porque le damos protección y un ámbito para su reproducción. Si los soltáramos, seguramente, los cazadores acabarían con los pocos ejemplares que quedan y que trabajosamente estamos tratando de conservar.

¿Cuál es el trabajo de un veterinario en un zoológico?
Es mucho y muy variado. En mi caso soy cirujano y trabajo en medicina de animales silvestres desde 1984 y director de Villa Dolores desde 2005. Con el paso del tiempo nos vamos especializando en el tratamiento de animales no domésticos, un trabajo que tiene su riesgo, pero que se termina haciendo sin temores. La cirugía es una actividad muy importante, pero no es sólo de médicos sino que necesita de todos los funcionarios de la institución. Por ejemplo, participamos en la operación a la elefanta Yothy (de 4.000 kilos), la primera en nuestro país; que se realizó hace casi quince años y necesitó un equipo de seis veterinarios, tres estudiantes, un cardiólogo y varios cuidadores que participaron en el manejo del animal. También fue necesario contar con funcionarios administrativos y de taller, para la compra de todos los insumos necesarios y para la fabricación de instrumental. El procedimiento duró más de dos horas y fue un éxito total.

Escuela de Tránsito para Niños
Es un espacio, dentro del Parque Zoológico Dolores Pereira de Rossell, donde se recrean situaciones de tránsito semejantes a la realidad. Por ser un lugar seguro, los niños juegan a ser conductores y peatones, respetando las reglas y poniendo en práctica los conocimientos recibidos en clases teóricas. Los más pequeños ( 1º, 2º y 3º), desempeña roles en competencias con “postas” hasta “cacería de señales”, todas para actuar como un “peatón seguro”. Los más grandes (4º, 5º y 6º) se desempeñan como ciclistas, cumpliendo los roles de conductores en esta pista.
La Escuela de Tránsito para Niños resulta una experiencia muy rica en aprendizaje. De lunes a viernes es la actividad para escolares, y los domingos se realiza el gran juego de los niños ciclistas (de 8 a 14 años), a cargo de educadores viales e inspectores de tránsito de la Intendencia de Montevideo.

Jaguares, yacarés, lobos marinos
Son animales autóctonos preservados por Villa Dolores, que acompañan nuestros sueños de conocimientos y de aventuras. Los tres están presentes en la clase de biología y cuidado del ambiente que reciben los escolares de cuatro y quinto año que visitan el zoológico, porque son parte de la fauna uruguaya y americana.
El jaguar es el felino americano de mayor tamaño, que originariamente vivía desde la Argentina al sur de los Estados Unidos, que en muchas regiones está casi extinguido porque fue cazado para quitarle la piel. Su nombre científico es Pantera onca, pero tiene muchos nombres: onza, ocelote, tigre americano, yaguar, yaguareté (palabra que significa “fiera verdadera” en guaraní).
Vive cerca de ríos, pantanos y bosques frondosos, donde puede hacer lo que más le gusta: jugar, nadar, trepar. Es un cazador solitario que se alimenta de ciervos, zorros, carpinchos y muchos peces, porque es un excelente nadador siempre al acecho. Es bastante solitario, se relaciona poco con otros de su especie, salvo cuando debe reproducirse. Una mamá jaguar puede tener hasta cuatro crías por parto, gestadas cien días en su vientre; después que nacen los cuida, los amamanta con su leche y les enseña a cazar. Tiene muy desarrollado el olfato, la vista y el oído, es muy veloz, utiliza uñas retráctiles para desgarrar a su presa y una poderosa muela carnicera para devorar su alimento natural: la carne.
Su piel es amarilla rojiza, con manchas negras redondas que tienen un lunar en su interior. Es parecido al leopardo –de origen africano y asiático– pero también es distinto; porque el leopardo no tiene lunares.
Uno de los objetivos de los zoológicos modernos es promover la reproducción de especies en peligro, como el jaguar o su pariente lejano el puma. En Villa Dolores podemos disfrutar de “Soledad”, una joven jaguar montevideana, nacida el 7 de diciembre de 2004, que recientemente dio a luz dos hermosos cachorros.
El yacaré es un reptil de la familia de los caimanes –un primo sudamericano del cocodrilo– que vive en regiones pantanosas y lagos de Argentina, Bolivia, Brasil, Paraguay y Perú, en las cuencas del Amazonas, el Paraguay y el Paraná. En nuestro país es una especie casi extinguida; que cada vez se encuentra menos en su habitab original: el río Cuareim y sus afluentes, en los departamentos de Artigas y Rivera.
Su denominación científica es Caiman yacaré, pero también recibe muchos nombres: yacaré negro, caimán del Paraguay, yacaré piraña, jacaretinga. Puede medir hasta 2.5 metros de largo, desde la cola hasta su hocico que es alargado y angosto; aún con la boca cerrada se ven varios de sus 80 dientes dispuestos en tres hileras.
El yacaré es carnívoro; se alimenta de tortugas, caracoles y otros moluscos y crustáceos, además de peces, a los que acecha con la boca abierta para tragarlos cuando se ponen a su alcance. Es capaz de cazar otros reptiles y aún mamíferos pequeño, pero evita hacerlo porque no puede gastar mucha energía. Es un heterotermo, de temperatura variada, aunque se dice que es un animal de sangre fría; que hiberna en otoño e invierno. Es un ovíparo que se reproduce a comienzos del verano; los machos marcan el territorio y combaten para expulsar a los más débiles. Las hembras hacen su nido cerca del agua, para proteger entre 20 y 40 huevos fecundados.
Es una especie protegida, en riesgo de extinción, porque que se lo caza para fabricar zapatos y carteras. Se lo mata para quitarle solo dos tiras de piel de los costados de su barriga; con una triste relación comercial: con dos yacarés se hace un par de zapatos.
El lobo marino (Arctocephalus australis) es el rey de la fauna uruguaya. Con su cercano familiar el león marino (Otaria byronia) forma parte de la mayor reserva natural del mundo de estos otáridos (de orejas desarrolladas), que queda en las costas atlánticas de Maldonado y Rocha. En esa zona viven más de 80 mil ejemplares que hacen de la Isla de Lobos y de los islotes del Cabo Polonio –donde se reproducen entre noviembre y diciembre– un ecosistema único en el planeta. Hay una tercera especie que suele pasar por allí, el elefante marino (Mirounga leonina), casi siempre descansando en sus viajes de eterno migrante.
Las Tres Gracias de Germain Pilón.
Tanto el lobo marino o lobo de dos pelos y el león marino o lobo de un pelo suelen ser confundidos con la foca; pero son distintos. Todos son oscuros, todos comen peces, pero hay dos diferencias muy visibles. El lobo tiene las orejas desarrolladas detrás de los ojos, aletas extensas y largas que le permiten mayor articulación y favorecen el desplazamiento en superficies rocosas. Las focas carecen de pabellón auricular y sus cortas aletas le dan mayor fuerza para nadar, pero muy poco movimiento en tierra. 

Tres Gracias
Como inusual aporte de la cultura los Rossell y Rius ubicaron en el parque valiosas copias de esculturas en mármol y bronce, algunas griegas como el Discóbolo de Mirón y varias Venus; obras del Renacimiento, por ejemplo el Moisés de Miguel Ángel, los fondos del Hospital de Florecia, las Tres Gracias de Germain Pilon, cuyo original está en el Louvre; ninfas con amorcillos o coronadas de flores, del siglo XVIII; figuras románticas arrebujadas en velos marmóreos del siglo XIX; copias de bronce de los escultores animalistas franceses del siglo pasado. Manada de seis lobos, jabalíes,
leones y tigres en acecho, guardan aún hoy el rincón de los juegos infantiles...”
Extracto de Los barrios de Montevideo, de Aníbal Barrios Pintos y Washington Reyes Abadie, 1995. 

Vida, cultura, color
No fue solo por estética. También hubo un deseo muy humano de dialogar con
los vecinos, de intercambiar sonrisas amigables y colores cómplices. Los murales de Villa Dolores fueron creados entre 2003 y 2004, por veinte artistas plásticos uruguayos –entre alumnos, docentes y egresados del Instituto Escuela Nacional de Bellas Artes– que realizaron los seis grupos pictóricos seleccionados en un concurso de la Intendencia de Montevideo.
Un trabajo que comenzó por la calle Dolores Pereira de Rossell, ante la curiosidad de miles de visitantes que iban a disfrutar de un paseo tradicional
y se encontraban con un espectáculo cultural. Los murales de Villa Dolores
cuentan sobre la vida preservada en un espacio repleto de color.